En Brasil, los análisis historiográficos sobre las fotografías de personas africanas y afrodescendientes iniciaron en 1961, con una perspectiva antropológica, cuando Gilberto Freyre publicó el libro O escravo nos anúncios de jornais brasileiros do século XIX (Freyre, 1979). La narrativa de los anuncios y no las fotografías, fue la fuente principal de Freyre, quien aprovechó el que los anuncios de fuga presentaran una descripción detallada de las características físicas, gestuales, el estilo de la indumentaria y su procedencia de África o Brasil. Por lo general, los anuncios de la época venían ilustrados con un dibujo de un muñeco negro con una bolsa en los hombros, pues solamente hasta el inicio del siglo XX los periódicos contaron con reproducciones fotográficas.
En su libro, Freyre publicó una colección de treinta y un retratos de mujeres, hombres y niños africanos o afrodescendientes. Estos retratos habían sido producidos entre 1860 y 1870, y los fotografiados eran personas esclavizadas o liberadas, de las regiones del sur y nordeste de Brasil (Freyre, 1979: 103). La colección fue colocada por el autor en el anexo final del libro, seguido de cinco pequeños comentarios, donde no se analizan las imágenes, sino se exponen las relaciones específicas entre señores y esclavos en Brasil que, según su interpretación, se basaban en una supuesta benevolencia por parte de los esclavistas portugueses. A esta teoría la denominó lusotropicalismo.